Ejemplares encontrados muertos en el campo


En las fotos que siguen se ve una rapaz decapitada al lado de una columna de un tendido elétrico ( a la que no vi que estuviera anillada), un cérvido que murió atrapado entre una valla de piedra y otra de rejilla metálica, cerca de la zona del Redegüelo y un zorro presumiblemente envenenado, encontrado en la Cañada.


ave al pie de la columna


una rapaz decapitada


cérvido atrapado


restos de zorro


Y en las fotos siguientes se pueden ver los efectos del tráfico rodado en la fauna local, en la primera se ve una culebra bastarda atopellada en la carretera que va a Villalba, por la zona de los Chopos, y en la otra se ve un erizo atropellado en la carretera junto a la antigua estación de El Berrocal. Es una pena porque cada vez es más difícil encontrar ejemplares de esas especies ya que quedan pocos debido al acoso humano con tanta urbanización que va acabando con el hábitat de algunos de esos seres vivos que habitaban nuestros campos, con lo que el desequilibrio de especies provoca rupturas de la cadena alimenticia de los animales salvajes.

ejemplar de culebra bastarda atropellada


erizo aplastado por un vehículo


En una de las marchas por los campos cercanos al pueblo, pude ver el cadáver de un animal que se ve en raras ocasiones, y es el eslizón, un reptil que parece que se arrastra, pero tiene unas extremidades, brazos y piernas, que le ayudan a desplazarse, y como son extremidades muy cortas, da la sensación que se desliza, pero ágilmente. Seguidamente se muestra un par de fotos, viéndose en la primera el aspecto del animal muerto, y en la siguiente se puede apreciar la extremidad anterior y su mano.

eslizón


En la foto de arriba se distingue que le falta la cola, pues está seccionada a la altura de las patas inferiores y en la foto que sigue se ve la pata delantera y se aprecia que tiene tres dedos, luego es el eslizón tridáctilo, de nombre científico Chalcides striatus, que se diferencia del eslizón ibérico porque éste tiene cinco dedos en lugar de tres.

extremidad anterior y mano



© 2006 - Antonio López Hurtado