Farmacias del pueblo desde 1936 y Ópticas.



Antes de empezar con los farmacéuticos del pueblo que hubo después de la guerra de 1936, vemos que las tareas de los profesionales de las farmacias realizan consisten en dispensar o supervisar la expedición y despacho de medicamentos de acuerdo con las prescripciones de los médicos, hacer la revisión de rectas para verificar su exactitud, comprobar las interacciones farmacológicas, mezclar medicamentos y preparar soluciones singulares, aconsejar a los pacientes sobre el uso adecuado de medicamentos, aprovisionamiento de medicinas, y comprobar los datos en los productos recetados, y una vez vistas las tareas de los farmacéuticos, vamos a ver las personas que ejercieron su labor en nuestro pueblo en la época dicha al principio.

En la historia de la farmacia de Moralzarzal a continuación de los hechos ocurridos en 1936 con la Guerra Civil, vemos que seguía de farmacéutico D. Manuel Torres Salcedo, y como la mayoría de los cargos públicos también estuvo incluido entre los vecinos que fueron sometidos a un tribunal de depuración de su comportamiento en los años que duró la Contienda y en tiempos inmediatos anteriores, así que visto un documento del Archivo municipal que está fechado el 8 de mayo de 1939 en el que aparece nombrado, y el documento es un bando del "
Alcalde Presidente del Ayuntamiento Nacional de Moralzarzal", D. Basilio Sanz González, en el que hace saber que en la sesión del día 6 de mayo, acordó incoar expediente de depuración a los funcionarios que se relacionan y aparecen en la relación el secretario Don José González Marruenda, el apoderado Don Eduardo Pancorbo Yañez, el alguacil Don Calixto Estévez Domínguez, el farmacéutico Don Manuel Torres Salcedo, el médico Don Manuel Ferrero Zarzuelo, el veterinario Don Manuel Cuenca del Coso, el recaudador municipal Leandro Bernardos González y la encargada de la limpieza del lavadero Sofía Bordón de la Rubia.
Acaba el documento diciendo que de este bando se ha repartido y fijado en los establecimientos públicos de esta localidad, 12 ejemplares, y se ven las firmas del Alcalde y la del Secretario.

El Alcalde recibe una notificación del Jefe Provincial de Sanidad fechada el 17 de enero de 1940 en la que le dice que el Gobernador Civil de la provincia ha tenido por conveniente admitir al servicio al farmacéutico D. Manuel Torres Salcedo sin imposición de sanción alguna.

D. Manuel continuó regentando la farmacia del pueblo hasta julio de 1940, viéndose un documento que envió al Ayuntamiento de Moralzarzal el Subdelegado de Farmacia en el distrito de Colmenar Viejo, D. Julio Quintana Torres, en el que certifica que D. Manuel
ha sido baja en esa Subdelegación, por haber cesado de ejercer la profesión en el pueblo de Moralzarzal.-
Y para que conste a petición del interesado, libro el presente en Colmenar Viejo a uno de Julio de mil novecientos cuarenta, y se ve la firma del Subdelegado, D. Julio Quintana.

Sigue la historia de la farmacia, y vemos que hay un documento que trata de la comunicación de traspaso de la farmacia de D. Manuel Torres a D. Bonifacio García Bilbao, y lo hace el subdelegado de farmacia del partido de Colmenar con fecha 7 de abril de 1940, y con fecha 15 de julio de 1940, el Ayuntamiento le comunica a D. Bonifacio que es interino provisional, y se comunica a los otros pueblos del partido, siendo ese partido el formado por Moralzarzal como capital, Becerril de la Sierra, Manzanares el Real, y Boalo con los tres pueblos que son Cerceda, El Boalo y Mataelpino.

Entonces, después fue boticario D. Bonifacio García Bilbao, que junto con su esposa e hijos, Carmina y Juan José, vivían en la vivienda que había donde estaba la farmacia, y la madre del boticario, Da. Benita Bilbao Fernández, que era viuda, también vivía con ellos y falleció en el Moral en octubre de 1940.

Hay otro documento en el Archivo municipal en el que se ve que se declara vacante la propiedad de farmacéutico, que se comunica a los otros pueblos a finales del mes de julio de 1940, y se ve lo que corresponde pagar a cada pueblo del partido farmacéutico, correspondiendo a Moralzarzal 2.120 pesetas con inclusión de residencia, a Becerril de la Sierra 336,20 pesetas, a Boalo 333,66 pesetas (Boalo 250,56, Cerceda 27,50 y Mataelpino 55,60), y a Manzanares el Real 214,44 pesetas.
El Subdelegado de Farmacia de Colmenar Viejo dirige una carta al Alcalde de Moralzarzal en el que dice ha recibido un oficio relativo a este asunto y que cuando D. Bonifacio tenga instalada la farmacia, se le comunique para proceder a girar la visita de apertura del establecimiento, y la firma el 29 de julio de 1940.
Los Ayuntamientos de los otros tres pueblos del partido mandan sendos comunicados al Alcalde del Moral entre agosto y septiembre, indicando que en sus respectivos pueblos, la Comisión Gestora ha acordado ratificar el nombramiento de D. Bonifacio como interino así como el cese de D. Manuel Torres y el anuncio de vacante de este distrito.

Seguidamente se muestra el oficio dirigido por el Ayuntamiento del Boalo a Moralzarzal.



La Jefatura Provincial de Sanidad comunica al Alcalde de Moralzarzal el 23 de octubre de 1940 que falta el anuncio del concurso para ser publicado en el Boletín Oficial del Estado, y que se lo envíe a esa Jefatura para su rápida tramitación, y se ve en otros documentos que tratan de este asunto del anuncio, como el que el Alcalde de Moralzarzal, D. Tomás Sepúlveda Antuñano, como Presidente de la Junta de Mancomunidad de la Agrupación forzosa del Partido farmacéutico Moralzarzal, Becerril de la Sierra, Boalo y Manzanares el Real comunica que por acuerdo de esta Junta de 20 de julio último se saca a concurso de méritos para su provisión en propiedad, la vacante producida por cese del titular que la desempeñaba, y se dice la dotación anual de 3.004,30 pesetas prorrateadas por los cuatro Ayuntamientos, indicando lo que corresponde a cada uno, que ya se ha dicho antes. Sigue diciendo que las solicitudes se dirigirán a este Ayuntamiento durante el plazo de un mes contado a partir de la publicación de este anuncio en el Boletín Oficial del Estado, acompañando copia del título profesional y certificado de haber sido depurado en relación con el glorioso Movimiento Nacional y ser adicto al Régimen, e indica las familias en beneficencia y población de los cuatro pueblos, correspondiendo a la Capitalidad (Moralzarzal) 23 familias y 864 habitantes, a Becerril, 18 familias y 739 habitantes, a Boalo 10 familias y 709 habitantes, y a Manzanares otras 10 familias y 512 habitantes, firmando este anuncio el 26 de octubre de 1940.

Se sigue tratando este asunto del anuncio, intercambiando comunicados entre la Jefatura Provincial de la Dirección General de Sanidad y la Alcaldía de Moralzarzal durante el año 1941, indicando errores y datos que han sido omitidos.

Hay una carpeta en el Archivo municipal que trata del Expediente de funcionarios sanitarios y va titulada:
Para provision en propiedad de la vacante de Inspector municipal Farmaceutico del partido Moralzarzal- Becerril de la Sierra- El Boalo- Manzanares el Real segun orden del B.O. del Estado de 18 de Noviembre de 1.942.
RESOLUCION DE CONCURSO, A FAVOR DE DON BONIFACIO GARCIA BILBAO

Y el primer documento es una carta manuscrita dirigida por D. Bonifacio al Alcalde-Presidente del Ayuntamiento de Moralzarzal, en la que se presenta diciendo su nombre y apellidos, natural de Gijón (Oviedo) de 38 años de edad, Licenciado en Farmacia y perteneciente al Cuerpo de Inspectores Farmacéuticos Municipales, y que solicita plaza de Inspector en Moralzarzal con sus anejos, los otros tres pueblos que con Moral forman el partido, y que ha visto la vacante en el B.O.E. de 18 de noviembre del corriente año para su provisión por concurso de méritos, y que acompaña la documentación que le acredita tener razones para solicitar la plaza, que lo firma en Moralzarzal el 17 de diciembre de 1942, como se ve seguidamente.



Entre los documentos que se ven hay uno del Jefe de la Sección de Inspectores Farmacéuticos Municipales de la Inspección General de Farmacia, en el que certifica que D. Boni lleva seis años, diez meses y veintisiete días de servicios en propiedad contados hasta el 31 de diciembre de 1940, y lo firma ese señor con el visto bueno del Inspector General en Madrid el 26 de noviembre de 1942.

Acompaña a ese documento otro en el que el Alcalde de Hita (Guadalajara) D. Lorenzo Fernández Prieto, certifica que D. Bonifacio ha ejercido el cargo de Inspector Farmacéutico en esa localidad, más de un quinquenio, firmándolo el 25 de noviembre de 1942.
Y hay otro documento expedido por el Instituto Provincial de Higiene de Guadalajara, en el que se dice que Bonifacio ha hecho un Cursillo de Ampliación de prácticas sanitarias de desinfección, desparasitación y análisis clínicos, químicos y bacteriológicos en ese Centro durante el mes de octubre de 1931, expidiendo el Gobernador Civil de la Provincia un diploma al respecto, y el escrito donde consta esto, es copia hecha por D. Bonifacio el 8 de diciembre de 1942.

Sigue en la carpeta del expediente antedicho, un escrito donde se dice el título de Licenciado en Farmacia de D. Bonifacio, dado en Madrid el 17 de agosto de 1928, y se da el nombre de las Autoridades Académicas que intervinieron en la expedición de dicho título que firma y sella, este documento, el Notario del Ilustre Colegio Notarial de Madrid, D. Andrés Domínguez Guitán el 10 de diciembre de 1937.

Se ve un documento en esa carpeta que es la Certificación Académica Personal certificada por el Catedrático-Secretario de la Facultad de Farmacia de la Universidad Central, donde constan las notas obtenidas en algunas asignaturas, destacando la calificación de sobresaliente y matrícula de honor en las asignaturas de Química General, Técnica Física y en Materia Farmacéutica Vegetal, y sobresaliente en Higiene.
Sigue diciendo que se encuentra en posesión del título de Licenciado que le fue expedido por la Superioridad con fecha 17 de agosto de 1928, siendo firmado este documento por el Secretario y el Decano de la Facultad en Madrid a 2 de diciembre de 1942, y siguen otros documentos como el de que D. Bonifacio es persona adicta al Glorioso Movimiento Nacional, expedido por el Jefe de F.E.T. y de las J.O.N.S. de Moralzarzal, y como eran los tiempos de recién acabada la guerra de 1936, había cosas que se tenían que hacer por las circunstancias, y seguidamente se muestra parte de ese documento expedido por el Jefe antedicho.



Sigue un documento en la carpeta de ese expediente, que se ve que es una carta en la que certifica el Juez de Paz de la villa de Hita de Guadalajara, en la que dice que los vecinos de ese pueblo, Manuel Alonso Medrano, Alejandro Esteban Palacios y Gregorio San Miguel Viejo, que por no existir documentación alguna a causa de haber desaparecido el archivo durante la pasada guerra, hacen constar que D. Bonifacio ejerció en esa localidad la profesión de farmacéutico desde el 3 de enero de 1930 hasta el 10 de abril de 1940, como propietario, y lo firman el Juez y el Secretario de Hita el 17 de noviembre de 1954 junto con algunos testigos, siendo este documento copia del original, que se firma en Hita a petición del interesado por el Juez de Paz, Miguel Gonzalo, y el Secretario, el día dicho.

El Alcalde de Moralzarzal, Manuel Sepúlveda firma un decreto el 30 de enero de 1943 en el que dice que ha quedado resuelto el concurso para la vacante de Inspector Farmacéutico Municipal de este partido a favor de D. Bonifacio García Bilbao, y ese mismo día el Secretario, José González, se lo notifica a D. Bonifacio, que toma posesión del cargo el primero de febrero de 1943, compareciendo junto con el Alcalde y el Secretario del Moral, el farmacéutico D. Bonifacio, de edad de 38 años, vecino de esta localidad con domicilio en la calle de la Iglesia no 1 principal izquierda, cuya documentación obra en el presente expediente, y el Alcalde le declaró posesionado, siendo comunicado al Sr. Jefe Provincial de Sanidad el primero de febrero de 1943.

El 27 de agosto de 1947 se comunica a D. Bonifacio el aumento de 1.500 pesetas anuales en concepto de gratificación fija y es firmado por el Alcalde, Manuel López, viéndose el prorrateo de los cuatro pueblos del partido farmacéutico de capitalidad Moralzarzal, correspondiendo a nuestro pueblo 729 pesetas, 375 por residencia y 354 por población, que se dice de 901 habitantes. A Becerril le corresponden 280,95 pesetas con 715 habitantes, al Boalo 283,35 con 721 habitantes, y a Manzanares 206,70 pesetas con un censo de 526 habitantes, que se comunica a las Alcaldías de los pueblos del partido.
Y hay otro documento en la carpeta del expediente en el que se ve que se le conceden 14 días a D. Bonifacio para asuntos propios, fechado el 24 de septiembre de 1947.

Haciendo un repaso a los documentos del Archivo municipal y para seguir el orden cronológico, se ve que se tiene que hablar de los documentos que tratan de la pensión de Isabel Iglesias, hija del anterior farmacéutico, D. Maximiliano Iglesias, del que se habla en los farmacéuticos de antes de la guerra, y se ve en uno de dichos documentos, que la dicha Isabel se dirige en una carta al Alcalde Presidente de Moralzarzal en la que solicita que la pensión que le fue concedida a su madre, Cándida López Martínez, se transfiera a ella y acompaña a esta instancia el certificado de defunción de su hermano Fernando y la fe de vida de ella, acreditando con el debido certificado su estado de soltera, y dice que no percibe pensión alguna del Estado, Provincia, Municipio ni Casa Presidencial, firmando esta solicitud en Madrid el 7 de diciembre de 1951.

En el Archivo municipal se encuentra una carpeta encabezada con el título de "
Expediente de partidos farmacéuticos" del año 1931, en la que el primer documento encontrado es la carta que dirige Isabel Iglesias a D. Luis Sánchez, diciéndole que le adjunta instancia y todos los certificados que le indicó el Secretario Sr. San Lorenzo, menos el certificado de nacimiento que espera recibir del cura de Becerril, donde nació, y que reclama ahora la pensión que no solicitó al fallecer su madre por entender que no tenía derecho a ella, pero que se enteró casualmente que le pertenece, y debía tener mucha amistad con Luis Sánchez, pues le trata de amigo, y se la manda a su domicilio de calle Alcalá no 194, 5o C, y le dice que si hace falta alguna cosa más, se lo comunique, carta del año 1951.

También mandó una carta en 7 de diciembre de 1951 al Alcalde de Moralzarzal que era D. Luis Sánchez Morales, en la que le dice que es huérfana de D. Maximiliano Iglesias, Inspector municipal y solicita que la pensión que se le concedió a su madre Da. Cándida López Martínez le sea transferida a ella, y acompaña el certificado de defunción de su madre y su hermano Fernando, junto con la fe de vida certificando que es soltera, haciendo constar que no percibe pensión alguna, mostrándose a continuación parte de esa carta.



Hay otro documento firmado por Isabel Iglesias dirigido al Secretario del Ayuntamiento de Moralzarzal, D. Alberto San Lorenzo Ayuso, fechado el 15 de diciembre de 1951, en el que Isabel le comunica que le adjunta el único certificado que le faltaba, y cree que estará ya todo según le pedía, y que hace días le envió una carta y cuantos documentos pidió en su carta del 28 de noviembre pasado, y ese documento es el acta de nacimiento de Isabel firmada por el Juez de Paz de Becerril de la Sierra, D. Jacinto Sánchez Sanz (pariente cercano del Sr. Luis como se le decía al electricista de Moralzarzal, pues era su hermano), en el que se dice que Isabel Bernardina Iglesias López nació el 27 de mayo de 1897, hija de Maximiliano Iglesias y de Cándida López, siendo sus abuelos paternos Bernardo e Isabel, y los maternos Antonio y Amalia, acta firmada por el Juez en Becerril el 10 de diciembre de 1951, junto con el Secretario.

Volviendo a los farmacéuticos, diremos que con D. Boni estuvo de mancebo Santiago Sánchez Esteban, que junto con su mujer María Balo vivieron cerca de la plaza de la Fuente en la casa de Da. Virtudes Marruenda, la esposa de D. Doroteo González, matrimonio que tuvo a D. Ángel González, capitán que fue asesinado en las Salineras en 1936. Después vivieron en la calle de Iglesia no. 1, donde la vivienda que había junto a la farmacia, y en 1959 se fue a Madrid, dejando la farmacia a la que vino con 17 años, allá por 1947 aproximadamente.
Me contaba su hija Ana, que Santiago hacía el reparto de medicamentos en una bicicleta llevando los medicamentos a los cercanos pueblos de Cerceda, Boalo, Mataelpino y Manzanares el Real, y a veces iba a Colmenar Viejo a por hielo para la nevera donde se guardaba la penicilina.

Y para curiosidad de los lectores y avivar el recuerdo de muchos vecinos del Moral, se muestra seguidamente esta foto con el cartel de la farmacia cuando estaba encima del Almacén en el edificio de la plaza.



Después estuvo de ayudante de D. Boni, haciendo de mancebo, el vecino y natural del Moral llamado Fidel Esteban Berrocal, conocido como Bubillo, hijo de Eugenio y de Consuelo, siendo su padre sastre en Moral, aunque natural de Becerril de la Sierra, y tuvo la sastrería en la calle de la Peñuela a la salida de la plaza y más tarde en la calle de la Fuente no. 1, y después estuvo de mancebo el "Cuco", apodo dado a Luis Alfonso Martínez Olarte, hijo de Domingo y de Gloria, que vivían cerca del bar Roma, y siguió Enrique Cilleruelo, que era del pueblo de Toledo llamado Gerindote, cercano a Torrijos.

El farmacéutico del pueblo D. Bonifacio García Bilbao y su esposa llamada Asunción Nuño, tuvieron a Carmina y a Juan José, que fue Presidente del Colegio de farmacéuticos de Madrid.
Don Bonifacio recibió en 1969 el premio del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Madrid concedido en 1968, y Juanjo, como llamábamos a su hijo Juan José, que también era farmacéutico, apareció en el periódico ABC del 31 de octubre de 1972 como vicepresidente del Colegio de Farmacéuticos de Madrid, y en la edición de ese mismo periódico del 30 de noviembre de 1973 se le ve entregando como presidente de ese Colegio, el diploma de colegiado de honor a un farmacéutico octogenario, D. Mariano Sánchez Covisa.
En el libro no 8 de bautismos de la parroquia de San Miguel Arcángel de Moralzarzal aparecen Juanjo y Carmina entre los jóvenes que fueron confirmados el día 29 de mayo de 1946 por el obispo auxiliar de Madrid-Alcalá D. Casimiro Morcillo poniendo para ambos que eran hijos de Bonifacio y Ascensión, siendo el padrino de los niños D. Bernardo Gasque, que era el médico del pueblo, y de las niñas fue Da. Isabel Morales López, firmando D. Félix Herranz presbítero, a la sazón cura párroco del pueblo.

Don Boni tuvo la farmacia del pueblo después de estar encima del Almacén, en la misma plaza, pero donde hoy día 19 de julio de 2024 en que se escribe esta historia, está el bar La Plaza, en el número 6 de la plaza de la Constitución, que se ve en la foto que se muestra seguidamente, sacada en época de fiestas, apareciendo en ella cuando era pequeño el vecino Ramón López Méndez.



Es curioso ver que hay documentos también en el Archivo municipal, que tratan de la licencia municipal de apertura de una oficina de farmacia en la calle Peñuela no. 6, con la fotocopia de su título facultativo, que posee los enseres, aparatos y utensilios que ordena la farmacopea española, el certificado del Colegio de Farmacéuticos, la fotocopia del contrato de arrendamiento del local y la fotocopia del recibo de Alta en la Contribución, remitiendo todos esos documentos a la Alcaldía en su solicitud de apertura del local que ya ha sido autorizado para abrir en dicha calle y lo firma en Moralzarzal el 26 de febrero de 1972.

Lo de la posesión de enseres lo justifica haciendo una declaración jurada de que los posee en el local de la calle Peñuela 6, y el Secretario del Colegio Oficial de Farmacéuticos de la provincia de Madrid certifica que de los antecedentes que obran en poder del Colegio, aparece como colegiado D. Bonifacio García Bilbao, que ejercerá su profesión en el local sito en la calle Peñuela 6 de Moralzarzal, según el derecho de traslado de su oficina de farmacia concedido por resolución de la Junta de Gobierno de fecha 13 de enero del año en curso, firmando el Secretario D. Carlos Pérez-Accino Gutiérrez el 3 de enero de 1972.

En este local, anteriormente hubo una tienda que puso Francisco González Estévez donde vendía los garbanzos y otras legumbres y se le veía despachar el aceite sirviéndolo con una máquina expendedora de bomba con manivela, y era el padre de Mariano González Lázaro, y este Mariano se lo alquiló a D. Boni, pero alrededor de los 80 sirvió como aula del colegio público municipal, ya que en el edificio escolar no había capacidad para tantos alumnos como eran, y recibieron clase los chicos y chicas de segundo y al siguiente curso escolar los alumnos de tercero, y después albergó el restaurante T. BONE STEAK MUSIC HOUSE y una vez cerrado, a continuación estuvo la cafetería y pastelería Yoli, y cuando se escribe esta historia se encuentra allí la cafetería RIFLAND.

El local lo alquiló D. Bonifacio, de 67 años de edad según el contrato, el primero de noviembre de 1971 a su dueño, Mariano González Lázaro, por tiempo de tres años prorrogables por 36.000 pesetas anuales, pagaderas por meses adelantados, y lo firman los dos interesados en la fecha antedicha.
Como cláusulas adicionales figuran que el local será destinado a oficina de farmacia y laboratorio, que se autoriza al arrendatario a colocar rótulos o banderines relativos a su actividad, y las que se suelen poner en todos los contratos relativas a las obras de conservación que serán de cuenta del arrendatario y las de decoración e instalaciones.
Se firman estas cláusulas el primero de noviembre de 1971, y en cuanto al croquis del local, se muestra seguidamente el presentado por D. Bonifacio en la solicitud de apertura.



Muchos recordamos a D. Boni cuando con su moto Sanglas y su mochila, llevaba las medicinas para los botiquines de Cerceda, Boalo, Mataelpino y Manzanares, que eran abastecidos por la farmacia de Moral que regentaba nuestro boticario.

Después de Don Boni, como se conocía a D. Bonifacio el farmacéutico, estuvo regentando la farmacia del pueblo D. Julio Ruiz Álvarez, hijo de Feliciano Ruiz Berrocal y de María Patrocinio Álvarez Aparicio, ocupando la farmacia donde estuvo D. Boni en el local de la calle Peñuela 6, hasta que al cabo de unos tres años allí, sobre 1973, se fue al nuevo local de la plaza de la Constitución no 5, casándose al poco tiempo con Da. Emilia Cruz, que también es farmacéutica, que empezó a trabajar en la farmacia con su marido.

Esta casa de la plaza de la Constitución donde Julio Ruiz puso la farmacia, la hizo de nueva construcción donde estaba la casa del cura, como se decía entonces a la casa de Emilia Mansilla Baonza, donde vivió el cura D. Remigio, y de donde fue sacado en el 18 de agosto de 1936 y asesinado el día 19 de ese mes en las Salineras, en término de Collado Mediano, y en la que la Sra. Emilia alquilaba habitaciones.

Julio cumplió 50 años en el oficio en 2023 continuando con él en la farmacia su esposa Emilia Cruz, y ésta estuvo trabajando en su propia farmacia de Madrid antes de ponerse a ayudar a su marido , y consiguieron sus títulos de Licenciado en Farmacia en la Universidad Complutense de Madrid en 1970, pero luego al frente de la farmacia del Moral siguió Cristina Ruiz Cruz, farmacéutica como sus padres, que obtuvo el título en el año 2005 en la misma Universidad, pero antes estuvo trabajando en diversos sitios como en un hospital de Granada donde hizo el curso de FIR, Farmacéutico Interino Residente, durante 4 años y desde 2014 es la que continúa llevando la farmacia como titular, una de las tres de este pueblo cuando se escribe esta historia.
Con Doña Cristina trabajan Maite Hernández Rodríguez que es auxiliar de farmacia, Betty Escobar Coello técnica de farmacia, y las farmacéuticas Patricia Triviño López y Sevdalina Dimitrova Borisova, siendo esta última natural de Bulgaria y Licenciada en Farmacia en Ucrania pero con su título homologado tanto en Bulgaria como en España.

En la siguiente foto se ve la farmacia de Julio Ruiz y que ahora la lleva su hija Cristina, que está en la plaza de la Constitución número 5.



Esta farmacia como las restantes de Moralzarzal pueden vender, además de medicamentos y al estar autorizadas para ello, complementos alimenticios, alimentos para los niños, artículos de cosmética y para la higiene personal, productos sanitarios y los dedicados a la puericultura, biocidas, en fin todos los productos relacionados con la salud y las necesidades para vivir bien, y aparte de las medicinas vende antisépticos, desinfectantes y aparatos para corregir o evitar deformidades del cuerpo que constituyen la ortopedia y utensilios para la visión como son las gafas.

Cuando se escribe esta historia, son tres las farmacias que hay en nuestro pueblo, la de la plaza de la Constitución de la que se ha dicho lo anteriormente escrito, la de la calle del Redondillo no 2, de la que es titular Ana María Domínguez Jácome, que la tuvo al traspasársela Celsa María Hernández Hernández el 26 de febrero de 2014, y la de la calle Vía del Berrocal no 47 llamada farmacia de Pereda, cuya titular es Amelia de Pereda Bañuelos.
Esta farmacia de Pereda cuya titular es Da Amelia, se dedica a las especialidades de salud, cosmética, higiene, nutrición y dietética, a las mamás y sus bebés, a protección solar y también al servicio de herbolario.
La titular de esta "botica" es Licenciada en Farmacia por la Facultad de Farmacia de la Universidad Complutense de Madrid, título que obtuvo en el año 1995 y ejerció su profesión en Talavera de la Reina en 1996 hasta que en 2006 vino a Moralzarzal para abrir aquí esta farmacia, en la que trabajan junto a ella otras dos Licenciadas en Farmacia llamadas María José Buitrago García y Carmen Miró Blanes.
Además colaboran con ellas en el despacho de medicamentos de esta farmacia las técnicas Mercedes Arruego, María del Carmen Romero Mora y María José Rosón, cuya labor como técnicas de farmacia consiste en procesar recetas, asesorar a los clientes sobre el uso apropiado de los medicamentos y demás productos farmacéuticos, preparar y expender las medicinas siguiendo las directrices de las farmacéuticas, controlar la existencia y caducidad de los medicamentos, cooperar en la elaboración de los medicamentos y hacer mediciones de constantes vitales de los clientes.

En el día 11 de julio de 2006 pidieron la licencia de obras y de actividades para abrir la oficina de farmacia, y el 6 de noviembre de 2014, la titular, Da. Amelia Pereda Bañuelos comunicó al Ayuntamiento su ampliación de horario, abriendo a partir del 13 de ese mismo mes los domingos y festivos, con lo que prácticamente abre todos los días del año durante 12 horas.

El documento en el que se ve la cesión de la farmacia a Ana María Domínguez, es un acta notarial de la cesión celebrada ante el Notario de Moralzarzal D. José Gascuñana Sánchez, que está fechada el 27 de febrero de 2014, en la que los herederos de la farmacéutica, Da Celsa Hernández, D. José María Pajares Box y Da Guiomar Pajares Hernández, firmaron la escritura de cesión de la oficina de farmacia a favor de Da Ana María Domínguez Jácome.

Celsa María tuvo su farmacia en la calle del Redondillo número 2, a partir de que el Ayuntamiento le diera permiso de apertura mediante el decreto dictado el 23 de abril de 1995 en el que le comunica "
Visto el expediente tramitado a instancias de Da CELSA Ma HERNANDEZ HERNANDEZ para instalar una OFICINA DE FARMACIA en la c/ REDONDILLO no 2, de esta localidad, previo cumplimiento de los requisitos siguientes:
Igualmente se aprueba la liquidación practicada conforme a la Ordenanza fiscal correspondiente, que asciende a 202.770 pesetas y que será notificada reglamentariamente".
Lo que le notifico para su conocimiento y efectos oportunos.
Y acaba con:
Moralzarzal, 24 de Marzo de 1.995., viéndose la firma del Secretario del Ayuntamiento.

La farmacia la instaló en una de las dos casas que se decían los hoteles de Escalada, quedando hoy día una con parte de la fachada en azul al lado de la farmacia que luego hizo en el edificio de al lado la farmacéutica que siguió a Celsa María, que era Ana María Domínguez, y mientras lo hacía, la farmacia estuvo en la que tenía Celsa María.



Además de las farmacias que son oficinas y tiendas para vender sustancias y productos tanto naturales como artificiales para remedio de las enfermedades y para conservar a la salud de las personas, se despachan artículos dedicados al cuidado de los humanos, y hay otras tiendas que son clínicas donde se hacen las revisiones de los médicos a los pacientes y otras que se ocupan de sanear la vista de las personas, y otras del cuidado de la dentadura de los enfermos de la boca y otros del cuidado de los pies, en fin que hay para tratamiento de todas las dolencias.

Pero vamos a hablar de las tiendas dedicadas al cuidado de la visión, las ópticas que están dirigidas por los ópticos, esas personas con titulación oficial para trabajar en materia de óptica.

En nuestro pueblo hay varias ópticas que se encuentran en la avenida de la Salud 1, en el Centro Choko Maite de la calle de la Iglesia y empezando por la del Centro Choko Maite, diremos que se llama
Óptica Ver Bien que está dirigido por la Diplomada Ma Carmen García Rodríguez, que tiene el título de Óptico Diplomado conseguido en Madrid el 22 de noviembre de 1985, nacida en Barcelona en 1963 y ejerciendo su oficio en nuestro pueblo en los últimos 25 años, habiendo estado anteriormente en el pueblo extremeño de Don Benito más o menos un año.
Está casada con un nativo de Moralzarzal y es nieta de un señor que fue Secretario del Ayuntamiento de nuestro pueblo, llamado D. Jesús Rodríguez Diaz, que tomó posesión de su cargo en 1969.
Se dedica a hacer exámenes optométricos, a tomar de tensión ocular, a la salud ocular, a la contactología, al control de la miopía, a la audiometría y a la adaptación de audífonos.

Hay otro centro de óptica que está en la avenida de la Salud 1, y es dirigido por el Diplomado por la Escuela de Óptica de la Universidad Central de Madrid, D. Javier Isac Gómez que obtuvo el título en dicha Escuela el día 4 de agosto de 2001, y es ayudado por Eduardo Figueroa Balseiro.
Puso la clínica de óptica en Moralzarzal en la avenida antedicha en el mes de mayo de 2005 que se conoce como
Ópti.K y D. Javier tiene más de 20 años de experiencia, ya que desde que obtuvo su título ha dirigido otras oficinas de óptica en Collado Villalba, Las Rozas y Manzanares el Real.
Trabaja con ellos la oficial de óptica búlgara Veselka Zdravkova Dimitrova, que es muy atenta con los clientes.

Y todo lo descrito en estas líneas, forma parte de la historia de nuestro querido pueblo, "El Moral".


© 2006 - Antonio López Hurtado