las campanas de la iglesia del pueblo

Así como hoy día se usa el reloj para saber qué hora es, antiguamente era el tañer de las campanas lo que hacía de reloj, y además hay que tener en cuenta que pocas personas tenían reloj en tiempos pasados y ahora, e incluso debido a la extensión de las poblaciones, no se podría apreciar el sonido de las campanas.
Yo recuerdo cuando se estaba alrededor del pueblo, o en la ladera de Matarrubia y se podía escuchar las campanadas del reloj de la plaza, ya en tiempos más modernos, y nos daban la hora, pero antes, eran las campanas de las iglesias las que daban información de determinados acontecimientos o de cosas rutinarias, y en tiempos de nuestros abuelos, por el toque se sabía qué hora del día era.
Por el tañer de las campanas, con sus distintos toques que variaban de ritmo, o que daban más o menos campanadas con una cadencia u otra, nos informaban de alarmas, anunciaban que se había producido un fuego, llamaban a oración, anunciaban el fallecimiento de algún vecino, y había toques extraordinarios anunciando la llegada de un obispo u otra persona importante. En fiestas mayores de la Iglesia se volteaban para anunciar el recuerdo de algún acontecimiento importante como el día de Resurrección, y otras muchas cosas, e incluso a veces permanecían en silencio, como ocurría en los días de Semana Santa entre el Jueves Santo y el Domingo de Resurrección.
Entre los toques que se hacían antiguamente, podemos ver los siguientes, y algunos ya no se dan por circunstancias del progreso y que ahora no serían de aplicación :
«A rebato»: Toque general y desorganizado que avisa de algún peligro grave. Según el diccionario de la R.A.E. era dar la señal de alarma ante cualquier peligro, y se empleaba para expresar el peligro de una incursión repentina del enemigo sobre el pueblo, al cual se avisaba tocando aprisa las campanas para que se pusiese en defensa, aunque ya está en desuso.

«Angelus»: Se mantiene hoy día en algunos lugares, y la versión más común consiste en tres golpes de campanas más un grupo final de 9, 12 0 33 golpes. Se tocaba a la 6 de la mañana, a las 12 y a las 6 de la tarde por el Arcángel Gabriel, remontándose esta tradición al siglo XIII con el fin de recordar el momento de la Anunciación de Nuestra Señora la Vírgen María. En el siglo XV se tocaba solamente a mediodía, que es lo que se suele hacer en estos tiempos.

«Animas»: Este toque se ejecutaba a la puesta del sol y se realizaba en especial por las almas del purgatorio. Un modo de no olvidar a los fallecidos que pudieran necesitar de la ayuda de los vivos para acceder al reino de los cielos. Empezaba el reiterado toque de campanas, el Día de Todos los Santos desde el mediodía, después del Ángelus, comenzando el campaneo y doblando el toque de difuntos durante toda la tarde, noche y madrugada hasta que se hacía de noche. Actualmente ya no se toca y donde se conserva, solamente se sigue con el toque entre el mediodía y la tarde, parando las campanas para no tocar de noche.

«Difuntos»: Se solía ejecutar durante el camino hacia el cementerio con el difunto y en nuestro pueblo, hoy día se da este toque para anunciar el fallecimiento de un vecino, siendo un toque lánguido, lento y muy espaciado que se hacía con dos campanas distintas y que sobrecoge cuando suena.

«Fuego»: Es un toque específico, dentro del toque a rebato, y generalmente se tocaban varias campanas a la vez y de forma rápida para que acudieran a esta llamada los vecinos para sofocar algún incendio.

«Repique»: Toque alegre a ritmo vivo propio de los días festivos señalando determinados actos los días grandes de fiesta, cuando se tocaban las campanas «a vuelo», es decir, volteando las campanas tañéndolas de manera que sonaran repetidamente y con cierto compás en señal de fiesta y regocijo.

En la sacristía de nuestra iglesia hay un cuadro de control de toques para realizar éstos de forma automática, no como antiguamente que eran voluntarios de la vecindad o el sacristán los encargados de tañer las campanas (los campaneros), y en el cuadro de mandos que se muestra seguidamente se puede ver que tiene cuatro toques disferenciados que son el de repique, difuntos, ángelus y volteo.

cuadro


Cuando hace años se hacía manualmente el toque de campanas a base de cuerda, se realizaba de manera que según el movimiento dado o no a la campana se producía el repique manual, haciéndolo a base de tirar de una cuerda unida al badajo, cuando la campana está fija, el balanceo, que se consigue haciendo que la campana oscile de manera que el badajo se mueva al mismo ritmo y golpee la campana a un lado y al opuesto para producir el sonido, moviéndola a base de una cuerda unida al yugo del instrumento, y el volteo que se hace tirando de la cuerda unida al yugo, de manera que la campana haga un giro completo. El yugo es el armazón de madera que está unido a la campana y se apoya en los muros del campanario de manera que se pueda voltear, viéndose en las fotos que siguen, una campana con el badajo y el yugo que en la foto se ve que es metálico y se apoya en dos semiejes sujetos a las paredes del campanario.
Hoy día no se tocan las campanas como se hacía antiguamente, pues ha habido quejas de vecinos que no soportan el estar oyendo el insistente ruido producido al tocarlas, llegando en algunas poblaciones a prohibir el repique de campanas en la ciudad durante la noche y en otros lugares se ha considerado como alteración del orden público y los límites impuestos por ordenanzas y leyes relativas a la contaminación acústica, aunque hay sitios en los que se permiten el uso de acuerdo con las tradiciones locales.
Había también toques civiles que anunciaban por ejemplo llamada a Concejo, y hay un dato curioso visto en un documento del Ayuntamiento en el que hubo una queja del Concejo contra el Sr. cura por negarse éste a hacer ese toque. Ocurrió en el año 1781 cuando el cura párroco era D. Jacinto de las Marinas Valdés y los alcaldes ordinarios eran Eugenio Martín Rubio y Antonio del Álamo el mayor, y en el Ayuntamiento hay un documento de 1781 de correspondencia del Alcalde-Presidente que dice : «Actuaciones formadas a consecuencia de la negativa del cura en que se toquen las campanas a Concejo».

A continuación se muestra parte de un acta del Remate de una finca del vecino pueblo de Cerceda, remate del Chaparral Grueso (monte del Marqués), en el que se hace mención a lo dicho del toque a Concejo.

documento


En este documento se puede leer que está escrito : En la Villa de Cerceda a cinco días del mes de mayo de mil ochoctos y treinte y tres años siendo dia asignado para el remate del Chaparral Grueso, y siendo las dos de su tarde y precedido un toque de campana como se es de costumbre se reunieron el Sr Manl Barela unico alcalde ordinario, Eusevio Mrne Proce Sindico General, y no lo verifico Bentura Díaz regidor por ... , campana que se tocó en la iglesia de Santa María la Blanca, aneja a la parroquia de Moralzarzal.

Y se muestra a continuación una parte del acta de 1606 del libro de actas del Archivo municipal de Moralzarzal, en la que se dice que se reunieron
a boz de canpana tañida para tratar en Concejo sobre el remate de la taberna del moral, de la taberna del çarzal, y el Acuerdo Sobre el rrepartimio de la puente de Odon, y es otro ejemplo del uso de la campana para llamar a reunión del Concejo.



Seguidamente se muestra una foto de la campana grande de las dos que hay hoy día en el campanario. Antes de la guerra civil de 1936 había cuatro campanas, pero fueron requisadas para hacer munición para el ejército republicano, y después de la guerra había dos y la grande no tanto como la que había en su mismo lugar antes de su requisición, pudiéndose ver en la actualidad en el tercio de la campana (franja delimitada por un par de líneas en la parte superior que hay debajo de una orla), que pone «AÑO 1986», que es el año en que se fabricó, así como también la campana pequeña, aunque en ésta el año está en la parte inferior de lo que se denomina medio, por encima de la franja inferior que es el pie. Se ve también el yugo, que ahora es metálico, y a la izquierda se aprecia la cadena con la que el motor hace girar la campana en el volteo, y a la derecha se ve el martillo con el que se produce el repique de esta campana mayor, que está en la parte del campanario que da al mediodía. La campana pequeña está en la cara del campanario que da al saliente y también tiene un martillo que se acciona para el repique desde el cuadro de mandos de la sacristía, y no tiene motor para el volteo.

la grande


A continuación se muestran unas fotos de las campanas que hay en el campanario de la torre de la iglesia, a la izquierda la campana grande, en la que se ve lo dicho sobre el año de fabricación en el «tercio», igual al de la campana pequeña, realizándose el accionamiento de ese martillo desde un cuadro de mandos que se encuentra en la sacristía mencionado unas líneas más arriba, y en la de la derecha se ve un detalle del sello de la campana mayor donde dice el fabricante y el pueblo donde está la fábrica.

año  sello

Las campanas de nuestra iglesia se rompieron en la época en la que estaba de párroco «Don Paco» (Francisco Lomillos Lobo) y fue este cura el que las cambió, contactando con un tal Agapito, persona de una fundición que fabricaba campanas, y en 1986 se pusieron unas nuevas que fueron hechas en la fundición QUINTANA del pueblo de Castilla llamado Saldaña, pueblo de la provincia de Palencia, y que se dedican a fabricar campanas desde el año 1637.

Pero las cosas no son eternas y tienen su vida más o menos corta, de manera que esas campanas que se cambiaron en tiempos del párroco D. Francisco Lomillos, "Don Paco", al advertirse en 2023 que estaban muy sucias y tenían problemas con el volteo al tener mal el yugo y los rodamientos, se decidió llamar a la fábrica QUINTANA, del pueblo palentino donde se fabricaron, llamado Saldaña, como se ha dicho líneas arriba, y el día 14 de junio de 2023 vinieron a desmontarla y llevársela para su puesta a punto, siendo el día 17 de julio de este mismo año cuando la trajeron al pueblo y con medio de una grúa la subieron hasta el campanario.

Lo de la suciedad de la campana, se ve en las fotos mostradas sobre estas líneas, fotos que se hicieron en el mes de octubre de 2017, lo cual nos demuestra lo dicho.

La función del badajo, que cuando se cambió la campana en tiempos de D. Paco, se sustituyó por un mecanismo con un martillo mecánico para producir los toques, el cual se acciona automáticamente desde las sacristía mediante un botón de cuadro eléctrico de control de toques, se cambió de lugar, ya que estaba a la derecha del hueco-ventana donde se encuentra la campana según se mira a la torre desde la calle, y ahora se encuentra a la izquierda. También se cambió el yugo de la campana, pues antes era de hierro, como se ve en dichas fotos, y ahora se ha puesto de madera, y además se pusieron rodamientos en el yugo para poder voltearla fácilmente.

Así, que en las fotos que siguen, se ve la campana cuando se la llevaron, descolgándola con una grúa desde el campanario y la montaron en el camión de la fábrica Quintana de Saldaña.

  


Y las fotos de cuando la trajeron y la subieron hasta el campanario con un camión grúa, y la campana ya colocada en su sitio y sujeta a la pared del campanario.

  


Se aprecia en la foto de la izquierda, cuando estaba encima del camión en que la trajeros de la fábrica, lo limpia que está, y se ve uno de los rodamientos para que puedan voltearla, y en la otra foto, se ve ya colocada en el campanario y el martillo que está a la derecha de la campana, y un mecánico de la empresa que la reparó, probó a mano el volteo y pude escuchar el sonido producido por el badajo de la propia campana, al golpear en la parte de la campana llamada labio, al dar el volteo.
Ese volteo, es muy agradable y placentero el escucharlo, ya que alienta e incita a la alegría, como se ha podido comprobar al voltearse durante la procesión celebrada con motivo del día del patrón del pueblo, San Miguel Arcángel.


bibliografía : Archivo Municipal de Moralzarzal - legajo 79.1 y Libro de actas
Archivo Parroquial de Moralzarzal

© 2006 - Antonio López Hurtado